Por Rocío Díaz y Nicola Nicoletti
Monterrey, N. L. (www.pastoralsiglo21.org) 12 de marzo del 2018.- Mons. Pío Vito Pinto, decano de la Rota Romana, dijo que la situación familiar está empeorando y que es necesaria una nueva cruzada en la que todos, los obispos, párrocos y laicos, comuniquen el Evangelio de la familia y estén en la búsqueda de la comunión y sacrificio por el bien de la pareja.
En entrevista, Mons. Pinto dijo que en Europa la situación es dramática, se casan menos por la Iglesia y están afectados por el materialismo. Para muchos, la Iglesia ya no es el término de comparación. Hay una fe frágil.
“El Papa, aunque preocupado, es un hombre de esperanza. Él sueña que la Iglesia sea como un hospital de campaña, tiene que ayudar a las personas espiritualmente necesitadas, para ayudarlas tal como son. No hay fe de personas perfectas. La salvación es para todos. Los obispos y los párrocos son llamados a la gran obra de la salvación. Los jóvenes han perdido sus horizontes, perdidos en sus filosofías actuales. La Iglesia de Cristo, y por lo tanto de Francisco, ayuda a las parejas en las situaciones más variadas. Comparado con el pasado, los jóvenes son tomados por el hedonismo, por su egoísmo y no por el bien común. La pareja no tiene vida matrimonial por mucho tiempo, con demasiada frecuencia está dividida. En el pasado, para nuestros padres, la respuesta fue Cristo, la fe. Hoy ya no lo es más”, dijo el especialista italiano.
Mons. Pinto viajó a Monterrey y a la ciudad texana de Austin, para visitar las realidades eclesiales. En México encontró familias más estables y unidas que en Italia. “Aquí hay una realidad de mayor fidelidad en la vida matrimonial que en Europa, pero incluso en las dificultades, que están en todas partes, la Iglesia no abandona a sus hijos. Por primera vez, gracias a Francisco, la Iglesia vive dos Sínodos juntos.
Debemos tener en cuenta que el Sínodo anterior data de 1978, con San Juan Pablo II, agregó. Desde 1981, el tiempo de la exhortación Familiaris Consortio hasta la fecha, 37 años han pasado. La situación ha cambiado, empeorado.
“El Papa conoce y confía en Monseñor Rogelio y lo aprecia, dijo”. Es el pastor capaz, el alma de la comunidad que lleva frutos maduros y excelentes, así como también sus sacerdotes parroquiales. La realidad de la familia mexicana es positiva, más que en Italia, de parejas con numerosos hijos y matrimonios celebrados en la Iglesia. En Italia tenemos menos hijos por familia”.
Mons. Vito Pinto estuvo en la ciudad para hablar sobre la aplicación de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia. La Rota Romana es la máxima autoridad de la Iglesia católica en procesos de nulidad.