𝐁𝐢𝐞𝐧𝐯𝐞𝐧𝐢𝐝𝐚 𝐚 𝐌𝐨𝐧𝐬𝐞𝐧̃𝐨𝐫 𝐉𝐮𝐚𝐧 𝐂𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬, 𝐏𝐫𝐨𝐟𝐞𝐬𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞 𝐅𝐞 𝐲 𝐉𝐮𝐫𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐂𝐚𝐭𝐞𝐝𝐫𝐚𝐥 𝐝𝐞 𝐓𝐚𝐜𝐚́𝐦𝐛𝐚𝐫𝐨
Este martes 20 de agosto, se llegó a la Catedral de Tacámbaro, Michoacán, Monseñor Juan Carlos Arcq Guzmán, para realizar su profesión de fe y juramento de fidelidad a la Iglesia. Primero, fue recibido en la entrada de la Catedral, donde le fue presentado un Cristo, el cual beso, para después diriguirse a la capilla del Santísimo para orar por su nueva diócesis.
Durante la ceremonia celebrada en la Catedral de Tacámbaro, después de la liturgia de la Palabra, el Arzobispo de Monterrey, Monseñor Rogelio Cabrera López, dirigió un mensaje a Monseñor Juan Carlos, en el que en un primer momento manifestó su alegría por este acontecimiento.
“Estoy muy agradecido con Juan Carlos, que me haya permitido hacer un comentario a la Palabra de Dios que se ha proclamado del profeta Jeremías”.
“Ya saben que comparto la alegría de ustedes, aquí estamos tres antecesores de Juan Carlos: el Señor Cardenal Suárez Inda, Monseñor Gerardo y un servidor. Hace 28 años llegué a esta Iglesia y hace 23 me fui de aquí. Muy contento de venir a acompañar a Juan Carlos, como saben Juan Carlos, fue allá en Monterrey, Párroco, Rector del Seminario, Vicario de Pastoral y Obispo Auxiliar. Muchos motivos tengo para estar contento el día de hoy”.
“Y puedo decirles por estos 11 años que compartí con él, que es una buena persona, que es un buen pastor y que viene con mucho gusto, con mucha alegría a vivir con ustedes”, añadió el también presidente de la CEM.
Posteriormente, Monseñor Rogelio compartió dos ideas dirigidas a Monseñor Juan Carlos, sobre la lectura del profeta Jeremías proclamadas en la celebración.
“El Señor le dice a Jeremías: <<No tengas miedo, estoy contigo>>, y después el Señor toca su boca, eso es lo que hace el señor siempre, pero de modo especia, pero hoy de modo especial para ti, Juan Carlos, no tengas miedo, no estás solo, sigues a Jesús, Él va por delante, eres discípulo del Señor”.
“No tengas miedo porque junto contigo hay una comunidad cristiana, hay muchos fieles laicos que dan su vida por el Evangelio, hay muchas consagradas, muchos sacerdotes que te acompañaran en este camino, no estás solo, está el Señor. Pero también el Señor toca tu boca, para recordar que el Señor te da la palabra, una palabra para compartirla, palabra que tiene que ser de bendición, de consuelo y de ternura”.
“El pueblo necesitas oír palabras de esperanza, el pueblo necesita ser tratado con dignidad, con cariño y respeto, pues la palabra nunca debe de herir, debe de sanar, nuestra palabra nunca debe de agredir, nunca debe hermanar y por eso hoy pedimos por ti”.
“El Señor pone su mano en tu boca, Él mismo te da la Palabra, pero vamos nosotros a pedir por ti, porque es muy compleja la situación de la iglesia en el mundo, hay que poner en alto la verdad, pero también hay que aplicar siempre la tolerancia y la misericordia. La verdad necesita una cápsula para que pueda penetrar en el corazón humano, y es la misericordia”.
Finalmente, añadió: “Gracias por aceptar gozoso estar aquí en Tacámbaro, yo mismo te dije es una diócesis bellísima donde vas a ser feliz, donde el Señor te acompañará, los obispos que te precedimos somos testigos que llegas a un lugar de bendición, que Dios te acompañe, el Señor está contigo y no olvides que el ABC de la evangelización es un saludo, una sonrisa y una bendición”.
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Diócesis de Tacámbaro
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